PUNTA DEL ESTE (enviada especial).- “Estamos ante una temporada que es histórica, nunca vi algo así”. Así lo define Carlos Ferreira, jefe de puertos de la ciudad uruguaya. En línea con las proyecciones de la industria turística y el fuerte movimiento en todo el corredor esteño, las amarras de la marina se encuentran con un 100% de ocupación y la lista de espera incluye a más de 60 embarcaciones.
Entre lobos marinos que visitan a diario los puestos de pescado fresco, cientos de barcos argentinos se encuentran apostados en el puerto de Punta del Este. Y es que las embarcaciones de bandera nacional representan más del 60% de total de navíos atracados en aguas esteñas.
Imágenes del puerto de Punta del Este, desbordado de barcos, la mayoría de bandera argentina (Ricardo Figueredo / LA NACION/)
La guardia deportiva, que tiene lugar para unas 850 embarcaciones en total (entre las que se amarran en la marina y las que quedan en guardería), quedó repleta en los días previos a Año Nuevo. Está previsto, según Ferreira, que se mantenga así durante toda la temporada de verano. “Hay embarcaciones que llegan sin reserva y van a tener que pegar la vuelta, porque no hay lugar”, explica.
Y es que en la Bahía de Maldonado se puede ver a varios barcos anclados a la espera de un lugar. Uno, según pudo saber LA NACION, lleva cinco días en el agua aguardando poder ingresar a las marinas. La ocupación plena del puerto de Puerto de Punta del Este se da después de la polémica del último verano, cuando 200 barcos argentinos quedaron varados en Uruguay por una disposición del ministerio de Salud de la Nación que conduce Carla Vizzotti. El mal trago parece haber sido motivación para muchos que el año pasado se quedaron con las ganas de salir con sus barcos hacia Uruguay.
Imágenes del puerto de Punta del Este, desbordado de barcos, la mayoría de bandera argentina (Ricardo Figueredo / LA NACION/)
“Dos años después de la pandemia, los usuarios obviamente quieren vacacionar. Solo en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) hay unas 80 mil embarcaciones”, explica Ferreira a este medio.
En la oficina del puerto, donde se cierran los contratos por amarras, la desesperación de quienes llegan sin reserva es visible. “Extendé vos tu tiempo y dámela, yo te pago”, le dijo a Fernando una persona en lista de espera. “Tenía un barco más chico que el nuestro, no se lo iban a dar”, explicó a este medio el propietario de la embarcación, quien pidió la reserva de su nombre.
Imágenes del puerto de Punta del Este, desbordado de barcos, la mayoría de bandera argentina (Ricardo Figueredo / LA NACION/)
¿Cuánto sale una amarra en el Puerto de Punta del Este? Depende, en esencia, del tamaño de las embarcaciones. El costo se cobra por día y el valor aproximado es de unos US$4 por metro de eslora, por lo que lleva a la media de 12 metros de eslora a casi 50 dólares diarios.
A ese costo, que se mantiene con un descuento del 50% con respecto al precio histórico para atraer al turismo, se le debe calcular también un adicional por agua potable, cuyo costo es de otros US$4 por día, más un monto por cada metro cúbico. La energía también está entorno a los US$4 diarios, a lo que se suma un extra por kilo watts de consumo, según precisaron desde el puerto.
Imágenes del puerto de Punta del Este, desbordado de barcos, la mayoría de bandera argentina (Ricardo Figueredo / LA NACION/)
La demanda, informa el jefe de puertos, se incrementará aun más a mediados de enero, porque el 15 de enero se celebra el Circuito Rolex Atlántico Sur, la regata organizada con el Yacht Club Argentino. Eso se traduce en el ingreso de 70 embarcaciones y la obligación de salida de la misma cantidad del puerto. “Esperamos a una flota cercana a los 100 barcos, donde todos lucharán por subirse al podio el último día”, asegura la organización.
Por su parte, Ferreira anticipa que la demanda sería más amena a partir del próximo 8 de febrero, aunque no es garantía de que así sea. “Generalmente, en Punta del Este a partir del 8 de febrero no debería haber problema para conseguir una amarra, pero es una temporada récord, histórica. Nunca vi una cosa así”, señala.
Un emir en Punta del Este
En la zona del puerto, ubicada en la Península de Punta del Este, se observan embarcaciones de todo tipo. La media, explicó el funcionario fernandino, son de unos 12 metros de eslora (longitud de una embarcación desde la proa a la popa). No obstante, dos barcos se destacaron en las últimas horas: Alpha y Aquarius.
Las embarcaciones que llamaron la atención de locales y turistas son dos Yacht de alquiler que cobraron particular protagonismo porque son objeto de uso del emir de Qatar, Tamim bin Hamad al Thani.
La megaembarcación de cifras multimillonaria que apareció en el puerto de Punta del Este con la llegada del emir de Qatar (Ricardo Figueredo / LA NACION/)
La megaembarcación de cifras multimillonaria que apareció en el puerto de Punta del Este con la llegada del emir de Qatar (Ricardo Figueredo / LA NACION/)
Los movimientos del qatarí en tierra fernandina se manejan en un operativo de altísimo secreto y seguridad. “Estuvo ayer de reunión en uno de los barcos. Los dos navíos vienen desde Niterói, Brasil. Uno es para él, otro es para su equipo de seguridad”, informó una fuente con acceso al cronograma del emir.
Alpha y Aquarius, las dos megaembarcaciones de más de 90 metros de eslora fueron vistas el día de Año Nuevo navegar por la Bahía de Maldonado. A pocos metros de la isla Gorriti, los barcos lucían enormes incluso comparados a embarcaciones que por naturaleza se ven imponentes.
Traídas desde el estado de Río de Janeiro, en Brasil, las embarcaciones de alquiler se pueden conseguir por 1,5 millones de dólares por semana.