Mauricio Macri cumplió más de un mes en Qatar. El expresidente sigue con su agenda protocolar que le impone su rol como titular de la Fundación FIFA. Asiste a los partidos de Argentina, pero también estuvo presente en varios encuentros de este Mundial, como el partido entre Brasil y Corea del Sur por los octavos de final.
Esa noche, el exmandatario argentino compartió palco con varias figuras brasileñas, como Ronaldo, Roberto Carlos, Rivaldo y Cafú.
Ahora la invitación se extendió más allá. El príncipe de Qatar, Jassim bin Hamad Al Thani, organizó un mini torneo de pádel del que participaron el expresidente argentino y varias leyendas del fútbol que están presentes en este Mundial. Jugaron Gabriel Batistuta, que ayer perdió el trono como máximo goleador de la Selección argentina a manos de Lionel Messi, el brasileño Ronaldo y el holandés Patrick Kluivert.
También fueron parte la gloria del fútbol australiano Tim Cahill y David Beckham. La exfigura de la selección inglesa, actual propietario del Inter de Miami, tiene estrechos vínculos con la familia real qatarí: es el embajador del Mundial de Qatar, en un contrato de más de 200 millones de dólares por diez años.
Desde que llegó a Doha, Macri mantiene reuniones protocolares pero también aprovecha para ver fútbol, jugar al pádel, visitar amigos y atender la interna de Juntos por el Cambio por teléfono. Con Gaudio, fueron a visitar al poderoso emir Tamim Bin Hamad. El expresidente se mueve como un jefe de Estado, asiste a encuentros protocolares y mantiene reuniones con presidentes de otros países, con empresarios, jeques y emires.