Toque de atención a un Barça gris en Múnich

El Allianz Arena se le resiste al FC Barcelona. También al femenino. Las azulgranas, con su versión más gris, cayeron por primera vez esta temporada ante un gran Bayern que lo remató todo. Dos goles en diez minutos de Bühl y Magull dejaron fuera de juego a las de Jonatan Giráldez y Schüller sentenció el partido en el segundo tiempo. El Barça tendrá que esperar para hacerse con el billete a cuartos de final.

Podía certificar la clasificación el Barça ganando en Alemania y Jonatan Giráldez salió con su mejor artillería. Once prácticamente idéntico al que sacó en el Spotify Camp Nou y que tan bien funcionó. Solo un cambio: Mariona, ya recuperada tras su lesión, volvía a la titularidad en el lugar de Pina.

Dos goles en diez minutos

El Bayern tenía bien ensayado el plan de partido. Lo había hecho en la primera parte en Barcelona aunque le faltó tirar a puerta. Y reforzó su idea, seguro, viendo el último duelo liguero de las azulgranas ante la Real Sociedad. Porque el planteamiento fue calcado. Presión altísima desde el primer segundo de partido para desestabilizar a las culés.

Salió a enseñar los dientes el conjunto bávaro y en tres minutos tuvo dos claras ocasiones. La primera la sacó Crnogorcevic y la segunda, Paños. No pudo evitar la alicantina sin embargo un tanto de Bühl que llegó demasiado temprano. Un error en salida de balón -no se entendieron bien Walsh y Patri– provocó una pérdida que aprovechó bien la delantera alemana en el día de su cumpleaños para adelantar a las suyas. 

No tuvo suficiente. Las de Straus sacaron tajada de la fragilidad del Barça tras el gol para anotar el segundo. Schüller le ganó la espalda a Bronze y puso un centro que Magull remató con demasiada comodidad.

Un Barça irreconocible

Estaba irreconocible el Barça. Un centro del campo anulado, pérdidas constantes y errores defensivos que se pagan caros. Al Bayern le salía todo bien. Presionaba a la jugadora rival que tenía el balón y a todas sus opciones de pase. Y cuando el centro del campo no carbura, el conjunto azulgrana pierde su identidad.

Se dolió Schüller y se detuvo el partido unos instantes que le vinieron bien al Barça para tomarse un respiro. A partir de ahí mejoró en su juego y se mostró más fiel a su mejor versión. Geyse y Rolfö se acercaban con atrevimiento a la portería de Grohs. La guardameta alemana rechazó un disparo de Crnogorcevic y no señaló la colegiada unas manos claras de Tainara dentro del área. Al filo del descanso Grohs salvó un tanto de Aitana.

Decidió Giráldez actuar en la media parte y no esperó a hacer cambios. Dio entrada a Salma y Engen por Mariona y Walsh. Salió con una marcha más el Barça y con las ideas visiblemente más claras. Pero el Bayern volvió a la carga y necesitó una sola ocasión para marcar el tercero. La autora fue Schüller tras un error de marca de Paredes. De nuevo, fragilidad defensiva del Barça y falta de contundencia.

Geyse dio esperanzas que se quedaron en nada

Despertó el Barça gracias a Geyse. La brasileña le robó la cartera a Grohs cuando trataba de sacar el balón y lo mandó al fondo de la red para recortar distancias. El tanto de la esperanza fue precedido de los mejores minutos de las azulgranas. Salma y la misma Geyse pudieron hacer el segundo y un balón muerto en el área chica no encontró rematadora.

Con la misma velocidad que avanzaban los minutos se desvanecían las opciones del Barça, que creía en la remontada pero no encontraba puerta. Lo intentaron hasta el final con más corazón que cabeza Rolfö, Aitana, Bronze y Salma. Pero nada. Se agotó el tiempo. Las azulgranas cosecharon la primera derrota de la temporada en un partido para olvidar.

 

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