El proveedor de Apple, Foxconn, declaró que sus ingresos en noviembre cayeron un 11 % en comparación con el mismo mes de 2021, después de las protestas en la fábrica de iPhone más grande del mundo. Protestas llevadas a cabo por falta de salarios y pagos. Según ha comunicado Foxconn, la caída es el resultado de que su planta en Zhengzhou, China, se vea afectada por las restricciones del coronavirus.
En comparación con octubre, sus ingresos cayeron un 29 %, a pesar de alcanzar un récord de 5,9 billones de dólares taiwaneses (160.000 millones de libras esterlinas) de enero a noviembre. Eso es un aumento del 13,5 % en comparación con el mismo período en 2021.
El fabricante de productos electrónicos, que también fabrica consolas de juegos como PlayStation 5, citó “ventas sólidas” y “mejor suministro de componentes” entre las razones de su crecimiento, y atribuyó la caída de noviembre a las restricciones por el coronavirus. “La situación epidémica general se ha controlado, siendo noviembre el período más afectado”, declaró en un comunicado la compañía, cuya sede se encuentra en Taiwán.