Este miércoles (21.00 horas), el Barça Atlètic recibirá al Eldense, que es el segundo clasificado del Grupo 2 de la Primera Federación. La última vez que ambos equipos se vieron las caras, el 1de mayo de 2017, hace más de cinco años y ocho meses, el partido terminó con un escandaloso resultado. Los azulgranas ganaron por 12-0, la mayor goleada en la historia de la categoría de bronce, por aquel entonces la Segunda División B. Un partido que trajo mucha cola…
La caja de los truenos la destapó un futbolista del conjunto alicantino. El delantero mauritano Cheikh Saad denunció públicamente presuntas irregularidades en cuatro compañeros de su equipo por un caso de apuestas ilegales. Y no solo en ese partido, sino también en anteriores, aunque en ninguno con un resultado tan abultado. Habló de cantidades en los amaños que rondaban los 200.000 euros. Por lo visto, la del partido contra el Barça B era que perderían 8-0 al descanso y 12-0 al final, como así acabó sucediendo.
Investigación y detenciones
A petición de la junta gestora del club de Elda, hubo inmediatamente una operación policial que desencadenó cinco detenciones: la del representante del grupo inversor italiano que gestionaba el club, los dos entrenadores y dos jugadores, estos últimos puestos posteriormente en libertad.
Los hechos todavía no se han esclarecido, pues siguen pendientes de juicio.
La indignación del filial azulgrana
En el seno del filial azulgrana, por aquel entonces Barça B, la noticia sentó como un jarro de agua fría, aunque no tuvieran nada que ver con el caso. Desde el equipo lamentaron que se pudiera desprestigiar el triunfo en el que destacaron futbolistas como Romera, Alfaro, Perea y Cucurella. “Les habríamos ganado igualmente ocho o nueve a cero porque estábamos en un gran momento”, se dijo en el vestuario azulgrana.
