La Inglaterra de Gareth Southgate no enamora a la vista, no embellece el fútbol ni inventa nada nuevo, pero la Inglaterra de Southgate es regular, pasa eliminatorias. Se ha desprendido del miedo endémico de los ingleses a las fases finales y ahora compite y pasa rondas. Es la Inglaterra del fiable Southgate.
Las eliminatorias han dejado de ser un quebradero de cabeza para una selección que, desde 1966, solo ha vuelto a disputar una final de un gran torneo internacional. Desde 1982 hasta la llegada de Southgate, Inglaterra disputó 10 eliminatorias en Mundiales y cinco en Eurocopas.
En el torneo mundialista superó el 50 % de sus cruces, mientras que en el europeo, desde 1988, solo avanzó en una ocasión, cuando organizaron la Eurocopa en Inglaterra.
Cambio de rumbo
Estos números se han invertido desde que Southgate tomara el control del combinado nacional en septiembre de 2016. El dato es esclarecedor. Southgate ha disputado cuatro eliminatorias en Mundiales y ha superado tres, mientras que en Eurocopas ha pasado los tres cruces que ha dirigido, a excepción de la final en 2021 en la que perdió con Italia.
Ante Senegal, los primeros 30 minutos de juego fueron insulsos y dejaron espacio a los africanos para adelantarse. Sin embargo, el resultado justifica esos momentos de malo juego, como también el primer puesto en la fase de grupos justifica encuentros paupérrimos como el jugado ante Estados Unidos (0-0).