El Govern ha presentado oficialmente ante la fiscalía la correspondiente denuncia por las amenazas a la docente del centro educativo concertado La Salle tras el incidente con la bandera de España. Desde el Ejecutivo balear explican que las autoridades judiciales tendrán que determinar las responsabilidades derivadas de estas amenazas que el Govern considera “intolerables” y vuelven a manifestar su “compromiso” con los docentes. Además, inciden en que no dejarán “desamparado ningún profesor ni profesora” porque son “profesionales fundamentales para el futuro de una sociedad sana que tienen que ser respetados y protegidos para que puedan hacer trabajo libremente“.
El portavoz del Govern, Iago Negueruela, avanzó esta decisión el lunes tras el Consell de Govern y citó algunos de los insultos contra la docente expresados a través de las redes sociales como “rata”, “nazi”, “zorra separatista”, entre otros, además de que se ha filtrado su dirección y se ha atacado a su familia, difundiendo imágenes incluso de una hija menor de edad. Desde el Ejecutivo autonómico se entiende, por tanto, que los hechos podrían ser constitutivos de algún tipo de delito. Negueruela subrayó que se trata de una situación “inasumible en una sociedad democrática” y “no se puede pasar por alto”, cuando una profesora está cumpliendo sus funciones, “acompañada por el centro” docente.
Además, la profesora ha recibido amenazas de muerte y sufre un hostigamiento constante —fuentes cercanas explicaban a este diario que está “tan afectada que no tiene fuerzas para defenderse”— e, incluso, se difundió una fotografía de ella junto a su pareja y su hija menor de edad acompañada del texto: “Vamos a ir a por ella”. Asimismo, se ha visto obligada a eliminar sus perfiles en las redes sociales.
